Los exfoliantes de sal y azúcar son uno de los tratamientos caseros más fáciles y efectivos. Untar azúcar y aceite por todo el cuerpo no solo es increíblemente placentero, sino que además deja la piel fresca, radiante y tan suave como la piel de un bebé.
Pero uno de los mayores misterios sin resolver de todos los tiempos es este: ¿Por qué las compañías de productos de belleza cobran precios tan exorbitantes por los exfoliantes de sal y azúcar? Es increíble. Solo necesitas sal marina o azúcar mezclada con aceite portados y esenciales, ¡en serio! Aquí tienes algunas fórmulas para empezar.
Exfoliantes de Sal y Azúcar
1. Exfoliante corporal de plátano y azúcar
Cuando los plátanos empiecen a dorarse, úsalos. Este no usa aceite y se basa exclusivamente en los beneficios del plátano y el azúcar, que es ligeramente abrasivo.
- 1 plátano maduro
- 3 cucharadas de azúcar granulada
- ¼ de cucharadita de extracto puro de vainilla o tu aceite esencial favorito (opcional)
- Mezcla los ingredientes en una batidora hasta formar una masa espesa. No tritures demasiado o quedará demasiado líquida.
- Si quieres un exfoliante de plátano para el rostro, reserva un poco y tritúralo aparte, sin azúcar.
- En la ducha, masajea suavemente el cuerpo con la mezcla de azúcar.
- Para el rostro, masajea suavemente el plátano solo, evitando el contorno de los ojos.
- Enjuaga con agua tibia.
2. Exfoliador de Sal, Limón y Romero
Para los hombres (o las mujeres, o los deportistas), mezclar hierbas aromáticas con limón y sal es un lujo para la piel. (Si no lo usas mientras cocinas, claro). El romero es especialmente vigorizante y realmente espléndido.
- Sal
- El jugo de 1 limón
- Romero
- Aceite de oliva
- Mezcla los ingredientes.
- Usa cuando te duches y enjuaga bien.
3. Exfoliante de Azúcar con Tomate
Esta receta es increíble para lucir unas manos radiantes y una piel suave. Utiliza una rodaja de tomate como protector, junto con todos los nutrientes.
- Rodaja de tomate
- Aceite de oliva
- Azúcar morena
- Licúa los ingredientes hasta obtener una pasta suave.
- Usa en la ducha, frota sobre la piel como si fuera un buen masaje.
- Enjuga con abundante agua.
4. Exfoliante de Azúcar Morena, Vainilla y Coco
El aceite de coco tiene una fragancia sutil y es ligeramente milagroso. Es un súper hidratante y prácticamente también sirve como postre.
- 1/2 taza de aceite de coco
- 1/2 taza de azúcar moreno
- 1/2 cucharadita de vainilla
- Mezcla los ingredientes.
- Frota sobre la piel mientras te duchas, masajea y enjuaga.
5. Exfoliante Labial de Menta y Azúcar
Este tratamiento rápido es el definitivo para labios suaves.
- Aceite de oliva o jojoba
- Azúcar extrafina
- Extracto de vainilla o menta
- Mezcla un poco de aceite de jojoba o de oliva con azúcar extrafina (también puedes prepararla tú misma poniendo azúcar granulada normal en el procesador de alimentos durante un minuto)
- Añade un toque de extracto de menta o vainilla.
- Aplica un poco de la pasta en tus labios y masajea.
6. Exfoliador de Sal y Lavanda
Lavanda y sal, ¡por fin juntas! Este vibrante exfoliante de sal te cura la piel seca y el ánimo decaído.
- Sal fina
- Aceite de coco o almendras dulces
- Unas gotas de aceite esencial de lavanda
- Mezcla todos los ingredientes.
- Frota sobre la piel con un masaje.
- Enjuaga con agua tibia.
7. Exfoliante de Sal o Azúcar Cítrico
Este exfoliante te despertará, ideal para la ducha matutina o después de hacer deporte.
- 1/2 taza de sal marina
- 1/2 taza de aceite de tu elección (jojoba, almendra, oliva, el que prefieras)
- 1 cucharadita de ralladura de cítricos (limón, lima, naranja, pomelo o una combinación de ambos)
- Mezcla los ingredientes.
- Frótalo sobre la piel mientras te duchas (evitando el contacto con los ojos).
- Enjuaga bien.
Te damos una idea: Compra una bolsa de 3.9 kg de sal marina natural, lo que te dará suficiente para preparar casi 11 frascos de tamaño similar al de los productos comerciales. Invierte en aceites portadores (coco, almendras, oliva o jojoba) y aceites esenciales, ¡y listo! Puedes hacer lo mismo con una bolsa de 900 g de azúcar. Solo es cuestión de mezclar algunos ingredientes en las proporciones adecuadas. Puedes personalizar tus ingredientes, tener la seguridad de que no contienen químicos sintéticos, evitar el exceso de empaque y lucir una piel radiante en tu lindo rostro y cuerpo gracias a tu modesto esfuerzo.
